Contenido
Llega el día siguiente de correr una prueba tan exigente como es un maratón y debemos evitar las lesiones más frecuentes que pueden aparecer después de una carrera de larga distancia como son las sobrecargas musculares, las ampollas, las sobrecargas tendinosas, las uñas encarnadas o las uñas hemorrágicas.
Para ello hay que seguir una serie de recomendaciones.
Después de la carrera el pie ha sufrido un desgaste importante. Es el momento de descansar y de reponer fuerzas. Se pueden realizar baños con agua fría para disminuir la inflamación que se ha producido por la actividad.
Secar bien los pies con especial atención en los espacios interdigitales e hidratar bien la piel. Durante todo el proceso de higiene observamos el estado de los pies y las uñas y las lesiones que se hayan podido producir.
Ampollas
Si observamos alguna ampolla, el tratamiento que debemos seguir es: lavar bien con agua y jabón, realizar un pequeño corte en la piel que recubre la ampolla y vaciar su contenido. Posteriormente aplicaremos algún antiséptico como podivona yodada o gluconato de clohexidina para evitar que se infecte. Nunca pincharlas ni retirar la piel.
Uñas hemorrágicas
Si observamos alguna uña hemorrágica es conveniente no tocarla y acudir a un podólogo para que la trate. Nunca intentar arrancarla, con el paso del tiempo el crecimiento de la uña irá desplazando a la uña lesionada.
Acude a una clínica especializada si tienes molestias.
Si después de la carrera has sufrido alguna lesión, o tu cuerpo ha sufrido más de lo habitual, es recomendable que acudas a un centro especializado. Allí te realizarán un estudio de todo el aparato locomotor para diagnosticar las alteraciones que tengas, ponerles solución, mejorar tu rendimiento deportivo y evitar recaídas de las lesiones.