¿Qué son?
La metatarsalgia es un dolor localizado en la parte de delante del pie. Afecta a un 85% de la población femenina y se producen por cambios en la distribución de la presión plantar con la sobrecarga de alguna zona concreta que deriva en dolor.
Los síntomas de las metatarsalgia son: dolor, hinchazón deformidad, cojera, alteraciones de la piel como hiperqueratosis o helomas y dificultad para ponerse zapatos.
Las metatarlagias pueden ser primarias o secundarias.
Las metatarsalgias primarias tienen un origen en la anatomía o en la biomecánica del pie. Desalineaciones en los metatarsianos, deformidades en los dedos o deformidades en los pies como pie cavo pueden desembocar en dolor en la parte de delante del pie.
Las metatasalgias secundarias tienen origen en diversas enfermedades o en causas extrínsecas al cuerpo. Patologías como la artritis, la gota o la diabetes pueden producir cambios en la forma del pie y a su vez una metatarsalgia.
El diagnóstico de la metatarsalgia se basa en la exploración del pie y el análisis biomecánico de la pisada.
Dedos en garra y martillo
Se trata de una deformidad de los dedos que evoluciona en el tiempo. Una diferencia entre los tendones de la parte de arriba del pie y de la de abajo acaba produciendo una contractura en los dedos y los curva. Al principio suelen ser blandos pero con el tiempo los dedos quedan curvados y rígidos lo que dificulta el caminar y calzarse.
Los juanetes también predisponente en el tiempo a que los dedos adyacentes se deformen. Al igual que con los juanetes se usan medidas complementarias como siliconas o plantillas pero no modifican la deformidad. Solamente la cirugía es capaz de revertir la deformidad.