Caminar descalzo por casa es más propio de los meses de primavera y verano, pero todo lo contrario, caminar descalzo es beneficioso y aconsejable durante todos los meses del año, incluso en invierno.
Eso sí, en invierno hablamos de caminar descalzo al llegar a casa con unos buenos calcetines y siempre que caminemos por una superficie limpia y sin desniveles.
Y este consejo es incluso obligatorio si hablamos de niños. Lo mejor es que nuestros hijos vayan descalzos en casa el mayor tiempo posible, el motivo es que los pies descalzos se desarrollan mucho mejor, más fuertes, con un puente más elevado y un mejor aprovechamiento de las estructuras del pie.
Nuestros pies son una obra maestra de la evolución con 26 huesos, 33 articulaciones y más de 100 tendones, músculos y ligamentos. La ingeniería evolutiva ha diseñado uno de los medios de comunicación más eficaces y adaptados que existen y que hoy ya no usamos.
Mucha gente estará pensando lo de aquel viejo mito de que «los resfriados entran por los pies». Realmente es un mito ya que los resfriados no tienen ninguna relación con los pies y ni vamos a enfermar por andar por casa en invierno sin zapatos.
Los virus no entran por los pies así que los resfriados tampoco. Sabemos que los virus se contagian de manera directa (al estornudar, hablar..) o de indirecta ( a través de las manos). Estos virus llegan a nuestras mucosas y en muchas ocasiones nos pueden provocar un resfriado, en otras no.
Los virus nos persiguen todo el año pero el frío hace que nos contagiemos más porque en invierno los virus aprovechan el calor y la falta de ventilación y renovación del aire de los espacios cerrados, mucho más concurridos, para propagarse.
Y además, el frío provoca la vasoconstricción en la mucosa de la nariz, habiendo una menor presencia de leucocitos que hacen de barrera ante los gérmenes. Visto lo visto, insistimos, no hay ninguna relación entre andar descalzo en casa en invierno y el resfriado. Lo que es cierto es que las personas expuestas a un descenso de temperatura en sus pies experimentan más síntomas de resfriado al cabo de cinco días. Los resultados se atribuyen a una constricción de los vasos sanguíneos de los fosas nasales, algo que puede reducir la capacidad inmunológica en el tracto respiratorio superior.
La otra excusa es la de los pies fríos.
Seguro que más de uno responderá que andar solo con calcetines es imposible porque tiene los pies muy fríos.
Tener los pies fríos es uno de los problemas más típico del invierno, esto se debe a que se produce una vasoconstricción de los capilares, es decir, los pequeños vasos por los que fluye la sangre se cierran y llegan a nuestros pies con gran dificultad.
Debido a nuestra morfología, los pies son la parte más alejada del corazón y el aporte de sangre no se realiza con la misma fluidez que a otras partes del cuerpo más cercanas al corazón.
La mejor recomendación es el uso de prendas que mantengan el calor, como los calcetines de lana o algodón y evitar otros tejidos. El calzado debe mantener seco al pie y lo impermeabilice de la humedad del ambiente.
Y os recordamos que no se debe recurrir a cambios drásticos de temperatura para calentar los pies o podemos provocar la aparición de sabañones, lo idóneo es que vayan adquiriendo temperatura poco a poco, por ejemplo metiéndolos en agua templada.
Estupendo análisis el que hacéis , me ha sido muy útil
Mi madre sigue creyendo que nos enfermamos por estar descalzos, que las anginas se nos inflaman por tener los pies fríos. Dice que no es cierto, que la mejor experiencia es haberlo vivido, así que no cree. Y como es mamá no creo que me dé la razón nunca.